miércoles, 28 de septiembre de 2016

Té y Campo.



Quiero ser como gato de campo en la inmensidad
Saciar los placeres por gusto y no por placer
Por que todo ya está dado. 

Cazar y apilar víctimas sin trascendencia
Aves pequeñas y algún desafiante zorzal
Huir con elegancia de las bestias mayores
y mirar con total desinterés a quienes creen
que están cruzando mis límites 

Jamás refugiarme de la lluvia
más que para dormir,
y así encerrarme con mis sueños
sin pedir jamás
que dejen de serlo.

Ver pasar al tiempo como a una presa postergada 
Recibir en mi pelaje de trigo las caricias esporádicas
de viajantes con afectos enfermizos. 

Fumarme la luna con la misma intención que
mi amigo solitario se fuma los tabacos. 

Elegir un hogar que puede ser el pasto crecido
O el taller de un abuelo y su radio
O la cocina de una abuela y su radio
O la rama del árbol donde al niño solitario le han colgado un neumático(ese niño enamorado
de su prima, porque no tiene de quien más enamorarse) 

Conocer tractores y faldas por debajo
mientras me sorprendo afectadamente
con las mentiras que remojan té tras té.

Poner la panza al sol con suma ternura 
Para que así me imiten y me extrañen
cuando haga los viajes eternamente anunciados.   

Ser ausente criatura sin lugar
Ser un lugar en sí mismo
Y si me decido a vivir:
¡Tomar té y caminar campo hasta morirme!


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